| Descripción |
Escena costumbrista que representa la vida cotidiana del comercio en un arrabal. En el centro de la composición, en primer plano, un hombre y una mujer, de pie, dialogan gesticulando con las manos; a la izquierda, un hombre sentado sobre un mojón de piedra se ata los cordones de su calzado, y junto a él asoma la cabeza de un burro con el arado. A la derecha, un aguador, de pie, con un cesto en su mano derecha, conversando con otra vendedora que se encuentra sentada en el suelo, de frente al espectador. Junto a ella, de pie, un niño sostiene en su mano derecha una rama de junco con churros. Tras ellos, la figura de un anciano, de pie, apoyado en su bastón y guiado por un perro. Al fondo de la composición aparecen silueteadas unas casas entre las colinas.
Los dibujos de Alenza reflejan, incluso mejor que sus pequeños lienzos, la espontaneidad y la fuerza de ejecución de una solución rápida; una capacidad de síntesis que capta todo aquello que es imprescindible. Las figuras humanas se convierten en símbolo del arraigo de las personas en su espacio natural, casi marginal, con una verdadera afirmación del valor del hombre como centro y base de referencia.
Algunos personajes de sus pequeños bocetos, tomados generalmente del natural, pasan luego, conservando fielmente sus características, posturas y ademanes, a formar parte de otras composiciones más amplias.
En algunas ocasiones se muestra tradicional en sus composiciones: el espacio representado sigue siendo unitario y escenográfico, siguiendo las reglas de la perspectiva clásica, en una concepción razonada y tradicional acorde a su propia formación académica.
A pesar de la sutil referencia al entorno, en muchos bocetos nos sorprende la habilidad con que, con escasísimas líneas, con trazos fuertes y desvaídos, casi inexistentes en algún momento, es capaz de ofrecernos el perfil de una ciudad que es inconfundiblemente Madrid.
La colección de dibujos de Alenza del Museo del Romanticismo pertenece casi íntegra a su faceta costumbrista, aunque tampoco se le puede considerar como el modelo exacto de las limitaciones del área tantas veces turbia del llamado "costumbrismo".
Muchos de estos dibujos son claramente modelos para grabar, como en este caso, y de algunos se conocen para qué ilustraciones fueron realizados.
|
